Estados Unidos intensificó su ofensiva contra los rebeldes hutíes en Yemen, que han amenazado con seguir atacando el tráfico marítimo en el mar Rojo, una de las principales rutas comerciales del mundo. Mientras tanto, la Unión Europea instó a Irán, el principal aliado de los hutíes, a evitar una escalada de la violencia en la región, que vive una situación de alta tensión por los conflictos en Gaza, Irak y Pakistán.
El comando militar estadounidense en Medio Oriente (Centcom) informó que había destruido 14 misiles de los hutíes, apoyados por Irán, que estaban cargados para su lanzamiento y que presentaban una amenaza inminente a las naves mercantes.
Los ataques se produjeron después de que el lunes un misil hutí impactara contra un carguero de propiedad estadounidense en el mar Rojo, en lo que parece ser el primer ataque exitoso de este grupo contra un buque de EE.UU.
Los hutíes, que controlan gran parte de Yemen desde 2015, han lanzado decenas de ataques contra barcos comerciales en el mar Rojo desde octubre, cuando estalló la guerra entre Israel y el grupo palestino Hamas en Gaza. Los hutíes dicen que sus acciones son una respuesta a la agresión israelí contra los palestinos; y, a la intervención de la coalición liderada por Arabia Saudí en Yemen.
La coalición saudí, que cuenta con el apoyo de EE.UU. y otros países occidentales, interviene en Yemen desde 2015 para apoyar al gobierno reconocido internacionalmente, que fue expulsado de la capital, Saná, por los hutíes. El conflicto ha causado la peor crisis humanitaria del mundo, según la ONU, con más de 230.000 muertos y millones de desplazados.
La Unión Europea, por su parte, expresó este miércoles su preocupación por la situación en Oriente Medio y pidió a Irán que contribuya a rebajar la tensión. En un encuentro en Ginebra, Suiza, el vicesecretario general del Servicio de Acción Exterior, Enrique Mora, se reunió con el viceministro de Exteriores iraní, Bagheri Kani, para abordar cuestiones bilaterales, regionales e internacionales.
Mora insistió en la necesidad de evitar una nueva escalada en la región, que ya sufre las consecuencias de la guerra en Gaza, los ataques en el mar Rojo, y los recientes atentados en Irak y Pakistán, atribuidos a grupos vinculados a Irán.
El representante de Irán, por su lado, denunció la “guerra genocida” en Gaza y acusó a Israel de ser el principal responsable de la inestabilidad en la zona.
