A estas horas de Perú (lunes 8 en Tokio), el aeropuerto de Haneda, en Tokio, reanudó sus operaciones normales, tras el trágico accidente que ocurrió el pasado 2 de enero, cuando un avión de pasajeros de Japan Airlines (JAL) colisionó con una aeronave pequeña de la guardia costera en la pista C.
El choque provocó que el avión de JAL se incendiara, sin embargo, fueron rescatados con vida los 379 ocupantes de la nave de JAL. Cosa diferente sucedió con los ocupantes del avión de la guardia costera en el que fallecieron cinco de sus seis ocupantes.
El accidente obligó a cerrar la pista C durante seis días, lo que causó la cancelación de cientos de vuelos, principalmente domésticos, en este aeropuerto, considerado el más concurrido del mundo, sobre todo estando culminando las festividades de fin de año 2023.
Las autoridades japonesas, con la colaboración de expertos de Francia, Reino Unido y Canadá, están investigando las causas del accidente. Según una transcripción de las comunicaciones aéreas, el avión de la guardia costera debía detenerse antes de entrar en la pista, pero el piloto, el único superviviente, creyó tener permiso para avanzar y se encontró con el avión de JAL, que estaba aterrizando, produciéndose la trágica colisión.
