La más nauseabunda historia de la política peruana, se inició el 7 de diciembre del 2022, cuando el Congreso compuesto por un vario pinto de políticos y politiqueros, muchos de ellos con investigaciones judiciales, quienes llegaron al parlamento para blindarse de las investigaciones, acordaron vacar al presidente constitucional Pedro Castillo Terrones de manera expedita.
El pedido vacancia, fue presentado por el congresista “no agrupado” Edward Málaga, por una supuesta incapacidad moral permanente, el mismo argumento de dos pedidos anteriores que no prosperaron, por lo que el tema adquirió la autoridad de cosa decidida; el pedido debía debatirse el día 7 de diciembre del 2022, a las 15:00 horas, en el que Pedro Castillo ejercitaría su derecho a la defensa. Sin embargo, el curso del trámite de la vacancia tuvo un vuelco sorpresivo, pues el Congreso adelantó el debate, con la justificación de que Pedro Castillo había leído a las 11:41 horas, un discurso en el que anunciaba la disolución del Congreso y la instalación de un gobierno de emergencia nacional.
La vacancia se impulsó mediante la aprobación de una Resolución del Congreso N° 001-2022-CR elaborada y presentada por el entonces presidente del congreso José Daniel Williams Zapata, quien lo sometió a votación sin ningún debate parlamentario, como una cuestión emergencia, para cuyo fin, de acuerdo con el Art. 89-A del Reglamento del Congreso, necesitaban 104 votos del total de congresistas; sin embargo, en la votación sólo obtuvieron 101 votos y luego se le sumó un voto supuestamente recibido en forma virtual.
De tal manera, la pretendida vacancia presidencial es inexistente, es producto de la vulneración del Reglamento del Congreso, por lo tanto, bajo la premisa legal de las consecuencias anulatorias de los actos administrativos, legislativos o judiciales, Pedro Castillo Terrones nunca fue vacado legalmente, por lo que sigue siendo el presidente constitucional del Perú.
La vacancia aprobada irregularmente y sin concederle el derecho a la defensa a Pedro Castillo, no contó con un nuevo pedido de vacancia, que sería la cuarta propuesta, y por lo tanto no se siguió los trámites regulares, esto es, ser aprobado por el parlamento y luego citar a Pedro Castillo para que efectuara su defensa. De tal manera, os congresistas que votaron a favor de la vacancia se encuentran gravemente comprometidos penalmente por un concurso real de delitos.
Para que Ud. conozca que bancadas de congresistas votaron por la vacancia, aquí se lo proporcionamos: 24 congresistas de Fuerza Popular, 6 de Perú Libre, 14 de Acción Popular, 10 de Alianza para el Progreso, 3 del Bloque Magisterial, 9 de Avanza País, 9 de Renovación Popular, 1 de Perú Democrático, 4 de Somos Perú, 3 de Cambio Democrático, 5 de Podemos Perú, 2 de Perú Bicentenario, 6 de Identidad y Desarrollo y 6 de los No Agrupados. Todos ellos votaron en complicidad con Williams Zapata, incurriendo en los delitos de Abuso de Autoridad y Rebelión, previsto por los artículos 346° y 376° del Código Penal. Aún más, ahora que se conoce los nuevos actos de corrupción del poder, podría elucubrarse la idea de que habrían votado de esta manera, en coordinación con la Fiscal de la Nación.