BRASIL: Más de 90 muertos y 130 desparecidos en Porto Alegre, por inundaciones
El alcalde de una importante ciudad en el sur de Brasil ha instado a los residentes a racionar el agua tras las inundaciones masivas que han dejado un saldo de al menos 90 muertos y más de 130 desaparecidos. Con un 80% de la población sin acceso a agua corriente, la situación es crítica.
Porto Alegre Aislada
La capital del estado de Rio Grande do Sul, Porto Alegre, se encuentra prácticamente aislada. El aeropuerto y la estación de autobuses están cerrados, y las principales carreteras bloqueadas. Se pronostican más lluvias para la región, lo que podría empeorar la situación.
Impacto en los Residentes
Los ciudadanos, como la profesora de yoga Maria Vitória Jorge, se ven obligados a abandonar sus hogares inundados y retirar ahorros para encontrar refugio temporal. La escasez de agua potable y la dificultad para realizar tareas diarias básicas son desafíos inmediatos.
Medidas de Emergencia
El alcalde Sebastião Melo ha ordenado que el agua se utilice solo para consumo esencial. Camiones cisterna están siendo llevados a campos de fútbol para distribuir agua embotellada, ya que las instalaciones de tratamiento de agua están fuera de servicio.

Escasez de Alimentos y Riesgo de Enfermedades
Además de la urgente necesidad de agua potable, hay escasez de alimentos y productos de higiene personal. Hay un riesgo creciente de enfermedades como el dengue y la leptospirosis debido a las condiciones insalubres.
Respuesta Nacional y Solidaridad
Otros estados están enviando donaciones a Rio Grande do Sul. El presidente Luiz Inácio Lula da Silva y otros ministros han visitado la región, y se están tomando medidas para prevenir la hipotermia ante la caída de las temperaturas.
Preocupaciones de Seguridad
La seguridad pública se ha visto comprometida, con informes de saqueos y robos. La Guardia Nacional se movilizará para reforzar la seguridad y proteger a los voluntarios de rescate.
Impacto en la Agricultura
El desastre podría afectar el suministro de alimentos, ya que Rio Grande do Sul es un importante productor de arroz. Se anticipa que la cosecha se retrasará y podría ser necesario importar alimentos básicos.
Este desastre natural ha puesto a prueba la resiliencia de Brasil y ha destacado la importancia de la preparación y respuesta rápida ante emergencias climáticas extremas.