El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, instó el viernes al primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, a aceptar un alto el fuego temporal con el grupo militante palestino Hamas, que controla la Franja de Gaza, para facilitar la liberación de los rehenes israelíes capturados durante el ataque del 7 de octubre.
Biden dijo que había tenido “extensas conversaciones” con Netanyahu en los últimos días y que le había expresado su posición de que “tiene que haber un cese de las hostilidades” para asegurar el regreso de los rehenes a salvo.
El mandatario estadounidense también expresó su esperanza de que se logre un acuerdo de alto el fuego y de rehenes, que según él se está negociando actualmente. “Veremos a dónde nos lleva”, dijo.
La guerra entre Israel y Hamas comenzó el 7 de octubre, cuando los militantes palestinos lanzaron un gran ataque contra el sur de Israel con cohetes y comandos. Israel respondió con una ofensiva aérea y terrestre contra Gaza, que ha causado más de 2.000 muertos, la mayoría de ellos civiles palestinos, según fuentes médicas.
La situación humanitaria en Gaza es crítica, con escasez de alimentos, agua, electricidad y medicinas. Más de un millón de personas se encuentran desplazadas en la ciudad de Rafah, cerca de la frontera con Egipto, donde se teme una inminente invasión israelí.
Según CNN, los funcionarios estadounidenses han sido directos con sus homólogos israelíes al decirles que los palestinos de Rafah “no tienen adónde ir” y que la orden de Netanyahu de evacuar la población es inviable. La administración Biden se muestra escéptica sobre la posibilidad de una solución pacífica al conflicto.
