Ante las protestas que se vienen realizando en Cusco por el nuevo sistema de venta online de entradas a Machu Picchu, la empresa Joinnus, encargada de administrar la plataforma www.tuboleto.cultura.pe, emitió un comunicado en el que niega cualquier proceso de privatización y ofrece al Ministerio de Cultura (MINCUL) terminar anticipadamente el contrato que tiene vigencia hasta agosto del 2024.
Según la empresa, su servicio se limita a la tercerización de la venta de entradas, sin tener ninguna injerencia en la gestión o administración de Machu Picchu. Además, señaló que desde el lanzamiento de la plataforma, el pasado 20 de enero, renunció voluntariamente a percibir la comisión variable por entrada a la ciudadela inca, como una muestra de su compromiso con el desarrollo del turismo nacional.
Joinnus indicó que está dispuesto a poner fin a la orden de servicio que le otorgó el Mincul y a participar en un nuevo proceso de selección, si así lo considera conveniente la entidad estatal. Asimismo, afirmó que siempre se ha ceñido a los procedimientos establecidos por el Ministerio y que ha cumplido con las normas técnicas y legales vigentes.
La empresa destacó que la nueva plataforma ha tenido una gran acogida por parte de los usuarios, con aproximadamente 100,000 personas ingresando en las primeras 24 horas. También resaltó que la plataforma ofrece diversas ventajas, como la posibilidad de comprar las entradas desde cualquier lugar del mundo, con diferentes formas de pago, y de acceder a información actualizada sobre la disponibilidad y los horarios de ingreso a Machu Picchu.
Sin embargo, el lanzamiento de la plataforma ha generado el rechazo de diversos sectores en Cusco, que acusan al Mincul de privatizar el patrimonio cultural y de afectar a los operadores turísticos locales. Por ello, desde el jueves 25 de enero, se inició un paro indefinido en Machu Picchu Pueblo, con bloqueos de vías y manifestaciones.
El paro ha obligado a la suspensión del servicio de trenes entre Ollantaytambo y Machu Picchu, así como del servicio de buses que trasladan a los turistas desde el pueblo hasta la entrada de la ciudadela.
Los manifestantes exigen la renuncia de la ministra de Cultura, Leslie Urteaga, y la anulación del contrato con Joinnus. También piden que se respete el derecho preferente de los cusqueños a la compra de entradas y que se implemente un sistema de venta descentralizado y participativo.
